La Posada de Orokieta es el lugar perfecto para disfrutar de buena comida y un ambiente acogedor en Calle San Tiburcio, 7. Con su terraza, es ideal para un desayuno tranquilo o un almuerzo después de pedalear por la ruta ciclista EuroVelo. Aquí la comida es casera y variada: desde raciones y platos saludables hasta cenas deliciosas, hay opciones para todos los gustos. Si te gustan las buenas reseñas, la Posada tiene una impresionante valoración de 4.7 en varias plataformas, lo que dice mucho sobre la calidad de su servicio y comida.
Los platos son un verdadero homenaje a la cocina mediterránea, así que no te sorprendas si te encuentras disfrutando de un rodaballo exquisito o unos choricillos a la sidra que te dejarán con ganas de más. Además, el ambiente es familiar y el servicio siempre atento. Si decides ir, no olvides probar el menú de fin de semana, que incluye múltiples entrantes y postres caseros que son un verdadero placer. ¡Con precios asequibles y una gran selección de bebidas, seguro que encontrarás algo que te encante!
Horarios Posada de Orokieta
| Día | Hora |
|---|---|
| lunes | Cerrado |
| martes | Cerrado |
| miércoles | 9:30–17:00 |
| jueves | 9:30–17:00 |
| viernes | 9:30–17:00 |
| sábado | 9:30–22:30 |
| domingo | 9:30–22:00 |
El horario podría cambiar.
Mapa Ubicación Posada de Orokieta
Dónde se encuentra la Posada de Orokieta
¡Oye, tienes que conocer la Posada de Orokieta! Es ese bar restaurante genial que está en la Calle San Tiburcio, 7, en Orokieta, Navarra. No estoy bromeando, ¡es una joya escondida! Si quieres disfrutar de una cena rica, te la van a dejar en un rango de 40 a 50 € por persona, pero te aseguro que la calidad y la cantidad de la comida hacen que valga cada céntimo. El ambiente es cálido y acogedor, y la gente que trabaja allí es súper simpática. No dejes de probar la Txuleta y la Ensalada Mixta, son platos que te van a dejar con ganas de más.
Ahora, si lo que buscas es algo más informal, su menú del día por 15 € es una auténtica maravilla. Todo lo que probé estaba buenísimo, y el servicio es muy atento (y eso se nota en cada rincón del lugar). Si tienes suerte y consigues mesa (porque está bastante concurrido), no te pierdas el rodaballo y los choricillos a la sidra, ¡están para chuparse los dedos! Y claro, si eres fan de la comida casera, aquí lo hacen todo con tanto cariño que parece que estás en casa de un familiar.
Y no puedo dejar de mencionar lo bien que se come en este lugar pequeño pero encantador. Cada platillo está elaborado con buena materia prima y las raciones son generosas. Hay que avisar que a veces es complicado conseguir mesa, pero si llegas sin reserva, aún así se esfuerzan en atenderte. Hay platos que son simplemente irresistibles, como el pulpo a la gallega y las croquetas caseras.
Así que, ya sabes, si quieres disfrutar de buena comida a un precio razonable y en un ambiente amigable, la Posada de Orokieta es el lugar que tienes que visitar. Recuerda, está en la Calle San Tiburcio, 7, 31866 Orokieta, Navarra. ¡No te lo pierdas!
Qué tipo de ambiente ofrece la Posada de Orokieta
Y ya que estamos hablando de la Posada de Orokieta, tengo que decirte que la experiencia ahí es algo que no te quieres perder. La comida es de muy buena calidad y se nota que el cocinero le pone un empeño y cariño impresionante a cada plato. No hay nada como sentarte a comer sabiendo que te están sirviendo algo hecho con amor, ¿no crees? Además, el ambiente es super cálido y acogedor. Perfecto para pasar un rato agradable con amigos o familia.
La camarera es otro punto a favor; es cariñosa y siempre risueña, te hace sentir como en casa. Imagina llegar allí y que te reciban con una sonrisa, ¡es lo mejor! Sin mencionar que los precios son asequibles, lo que siempre es un plus. La relación calidad-precio es fantástica, así que ni te desanimes si estás pensando en lo que podría costar una buena comida. Por lo que he oído, podrías estar gastando entre 20 y 30 € por persona, y eso está más que bien para lo que ofrecen.
Y aunque ha habido algunas opiniones negativas, como alguna gente que ha sentido que la atención no fue la mejor, la verdad es que la mayoría de las reseñas destacan un servicio cordial y profesional. Muchos han disfrutado de platos como el bacalao al ajoarriero o el pulpo a la gallega, y si no me crees, ¡pregúntales a quienes ya lo han probado! Una pareja incluso comentó que su cena fue un gran descubrimiento y que, sinceramente, volverán. Si eso no dice algo, no sé qué lo hará.
En cuanto al ambiente, la Posada de Orokieta ofrece un lugar tranquilo y acogedor, perfecto para pasar el día con la familia o los amigos. Está justo en frente del frontón, ideal si llevas niños pequeños que se quieren divertir. No hay nada mejor que disfrutar de buena comida en un lugar que también sabes que es apto para todos. Así que, si estás buscando un sitio que combine buena comida, un servicio atento y un ambiente cálido, definitivamente este es tu lugar. ¡No te arrepentirás!
Qué opciones de comida están disponibles en la Posada
Así que, qué te puedo contar de la Posada de Orokieta. Fue un auténtico descubrimiento que hicimos casi por casualidad, ¡y vaya que nos sorprendimos! El matrimonio que regenta el lugar son unas personas maravillosas, llenas de amabilidad y hospitalidad. Si alguna vez te encuentras por Calle San Tiburcio, 7, no dudes en parar. Recuerdo que fuimos un grupo con varias personas en silla de ruedas y nos trataron como reyes. ¡Qué pedazo de servicio! Nos invitaron incluso a desayunar porque estábamos recaudando para la investigación de enfermedades raras. Eso dice mucho del tipo de personas que son. Chapeau, de verdad.
Y hablando de la comida, ¡qué maravilla! La sopa de pescado y las gambas son de otro mundo, pero no se queda atrás la merluza, que estaba tan deliciosa que no sabías cuándo parar de comer. Los precios son bastante razonables para la calidad que ofrecen, así que no te sorprendas si terminas gastando entre 40 y 50 euros por persona. Otro punto a destacar es que tienen un ambiente realmente agradable, ideal para disfrutar de una buena comida con amigos o familia. Comida, servicio y ambiente todos con una calificación de 5 estrellas, ¡no se puede pedir más!
Y si buscas algo ligero o simplemente para picar, te recomiendo pedir alguna de sus ensaladas de entrante —la mixta es un must— y las croquetas caseras son un deleite. Si eres fan de los sabores del bosque, no puedes dejar pasar los hongos salteados y el revuelto de hongos. ¡Todo absolutamente exquisito! Si la comida es la razón principal por la que quieres ir, créeme que no te vas a arrepentir.
Ahora, ¿qué opciones de comida están disponibles en la Posada de Orokieta? Bueno, desde desayunos abundantes hasta comidas completas, aquí tienes de todo. Puedes comenzar con alguna de sus ensaladas, seguir con un buen bacalao al ajoarriero o, si te apetece algo más casero, optar por el flan de postre que te dejará con ganas de pedir más. La variedad es impresionante y creo que hay algo para todos los gustos. Así que ya sabes, la próxima vez que te acerques a Orokieta, ¡hazte un favor y date un capricho en la Posada!
La comida en la Posada es casera
Y hablando de la Posada de Orokieta, no hay forma de que no te enamores de este pequeño rincón en Calle San Tiburcio, 7, 31866 Orokieta, Navarra. Ya solo llegar al pueblo, con su ambientazo y ese toque especial que tienen los lugares bien cuidados, te hace sentir en casa. Fernando y María José son los anfitriones perfectos, siempre con una sonrisa y con ganas de hacerte sentir como en familia. ¿Y la comida? ¡De maravilla! Salimos de allí con el estómago lleno y el corazón contento.
Las raciones son generosas y están elaboradas con un mimo increíble. Las croquetas, por ejemplo, son legendarias. Si te gustan las croquetas, tienes que probar las de este lugar, ¡te van a encantar! Nos decantamos por un menú para campeones que incluía unas delicias como chorizos a la sidra, pimientos con jamón y esas espectaculares croquetas caseras en tres variedades. Todo con un toque casero que le aporta un extra de sabor. Y la calidad-precio está de diez; por aproximadamente 20-30€ por persona, comes como un rey. Sin duda, hay que repetir.
Y no solo es la comida lo que impresiona, el trato es excepcional. El personal es atento y muy amable, siempre dispuesto a ayudarte y hacerte sentir bien. Es más, nosotros llegamos desde Alicante a las 15.30 tras un largo viaje de 7 horas, y aún así nos recibieron sin problemas, listos para alimentar a un grupo de 5 comensales hambrientos. ¡Un 10 para ellos!
No olvides que el entorno es igualmente impresionante; un pueblo rodeado de bosques, justo el lugar perfecto para una escapada. Y si tienes pelotas, ¡hay un frontón justo pegado a la posada! Así que, si te apetece una merienda o un buen rato después de comer, ahí tienes la opción perfecta.
Y para la pregunta clave: ¿la comida en la Posada es casera? La respuesta es un rotundo sí. Todo lo que preparan es casero y hecho con mucho cariño, lo que se nota en cada bocado. Así que si tienes la oportunidad, no dudes en visitar este pequeño tesoro navarro; te garantizamos que saldrás encantado y con ganas de volver.
Qué platos destacan en el menú de la Posada de Orokieta
Ya te decía que la Posada de Orokieta es un lugar que merece la pena, ¡y qué fin de semana más impresionante hemos tenido! La atención fue de 10, de esas que te hacen sentir como en casa. Imagina a nuestra camarera, súper atenta y amable, cuidando de cada detalle. No hay forma de no salir contento de un sitio así. Y ni te cuento de la comida, ¡espectacular! Se nota que trabajan con productos de calidad.
Además, la relación calidad-precio es perfecta. Si te decides a cenar allí, puedes disfrutar de una experiencia increíble por unos 20-30 € por persona, y créeme, vale cada céntimo. Prueba la txuleta o las croquetas caseras, y aunque hay mucho más, esos platos son un must. El ambiente es muy acogedor, ideal si vas en plan familia o con amigos. ¡Nosotros, sin duda, repetiremos!
Lo mejor del sitio es que, al ser un pueblo pequeño, hay muchas plazas libres para aparcar sin estrés. Te olvidas de buscar parking y te pones en modo relax. Perfecto, ¿no crees? Tienes la ventaja de poder dejar el coche cerca sin problemas. Y si vas con niños, hay un frontón y una plaza al lado donde pueden jugar mientras tú disfrutas de una buena comida.
Por cierto, si aún te estás preguntando qué platos destacan en el menú, no puedes dejar de probar el secreto ibérico a la parrilla y la ensalada de entrante. Son simplemente maravillosos. En la Posada de Orokieta, cada bocado es como un abrazo de sabor, así que ¡hazte un favor y ve!
Es la Posada de Orokieta adecuada para comidas familiares
No sé si os habéis pasado por la Posada de Orokieta en Calle San Tiburcio, 7. Si no lo habéis hecho, ¡tenéis que hacerlo! Estuvimos comiendo allí y la verdad es que salimos encantadísimos. La comida está de 10, bien preparada y con ingredientes de calidad. Además, el servicio es espectacular; el personal es super amable y siempre está dispuesto a ayudarte, lo que hace que la experiencia sea aún mejor. No es de extrañar que le hayan dado en general 5 estrellas a todo: comida, servicio y ambiente. ¡Impresionante!
El ambiente es muy acogedor y familiar, ideal para disfrutar de una buena comida en un sitio tranquilo. Aunque estaba bastante animado, especialmente porque hay un frontón y un pequeño parque justo afuera, lo que le da un toque especial, sobre todo si vais con niños o si planeáis una ruta en bici. Nos pareció un lugar perfecto para hacer una parada y disfrutar de un rato agradable sin presas. La relación calidad-precio es genial; por unos 20-30 € por persona puedes comer muy bien, así que no tienes excusas para no ir.
Si os gustan los postres, no olvidéis probar la tarta de queso, ¡es casera y buenísima! En mi opinión, se nota que toda la comida está hecha con cariño. De hecho, la atención que dan es tan buena que no parece que estés en un restaurante, sino en casa de un amigo. La verdad es que este lugar tiene un ambiente tan chulo que apetece volver a visitarlo.
En cuanto a si la Posada de Orokieta es adecuada para comidas familiares, la respuesta es un rotundo sí. Hay espacio suficiente, y el trato es tan acogedor que te sientes como en casa. Además, como mencioné, el pequeño parque y el frontón exterior que tienen lo hacen genial para que los niños puedan jugar mientras los adultos disfrutan de la comida. Sin duda, si estáis buscando un lugar donde pasar un buen rato en familia, este es el sitio ideal. ¡No os lo perdáis!
